La quema masiva de pirotecnia: Un espectáculo que contamina

Autores: Robles Gonzaléz IV, Reyna Velarde R, Guerrero Barajas C, Robles González VS, Ordaz Alberto

Resumen

En diversas partes del mundo, la pirotecnia es ampliamente usada durante celebraciones religiosas, culturales, deportivas, nacionales y familiares, que aunque son actividades lúdicas y de espectáculo, han generado preocupación por la emisión de contaminantes que no solo dañan la calidad del aire, sino que pueden provocar efectos tóxicos en los espectadores y en los ecosistemas. Se ha estudiado que la quema masiva de pirotecnia genera un aumento en el nivel de material particulado (PM 2.5 y PM 10) en el aire, cuya composición incluye metales como Na, K, Sc, Cr, Mn, Fe, Co, Zn, As, Br, Sr, Sb, Pb, Cs, Ba, Ti, V y Cu; además se generan gases de efecto invernadero como ozono (O3), dióxido de carbono (CO2) y dióxido de nitrógeno (NO2). En los cuerpos de agua y suelos cercanos a sitios de quema o de producción, se ha estudiado que se genera un incremento de perclorato (ClO4-), que es un importante componente en la formulación de pirotecnia y está asociado a problemas de salud en tiroides. En México, particularmente en el Estado de México, es una importante actividad comercial, ya que ahí se produce alrededor del 50 % de la pirotecnia comercializada en el país. En la Zona Metropolitana del Valle de México y durante las primeras horas del inicio de año se han registrado concentraciones de hasta 478 ± 150 ìg m-3 de PM 10 atribuido principalmente a la quema masiva de pirotecnia. El objetivo de este documento es hacer una revisión exhaustiva sobre los contaminantes emitidos durante la quema masiva de pirotecnia en diversas festividades alrededor del mundo y alertar sobre este tipo de contaminación que ha pasado desapercibida para la comunidad científica en México.

Palabras clave: Pirotecnia perclorato metales pesados contaminación atmosférica

2017-10-06   |   406 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 4 Núm.5. Septiembre 2017 Pags. 1-18 BioCiencias 2017; 4(5)