Resumen

Antecedentes: en los estudios de prueba diagnóstica puede hacerse la distinción en cinco fases que corresponden a diferentes objetivos. La fase III se denomina: estudio de exactitud diagnóstica. Objetivo: ofrecer a los médicos y a otros profesionales de la salud una introducción actualizada de los conceptos y herramientas estadísticas de estudio de exactitud diagnóstica. Descripción: el estudio de exactitud diagnóstica tiene como propósito determinar si la prueba de interés distingue a los sujetos con y sin la enfermedad de entre quienes se sospecha la enfermedad en una situación clínica cotidiana. Para cumplir este objetivo son decisivas: la selección del estándar de referencia válido, evitar los sesgos característicos de esta fase, identificar los parámetros que cuantifican la bondad de la exactitud diagnóstica y efectuar análisis estadísticos adecuados. Conclusiones: tanto para el uso de la información como para la realización del estudio de exactitud diagnóstica es necesario distinguir claramente esta fase de estudio como parte de los ensayos diagnósticos. Es importante conocer que la utilidad de la información de las fases II y III es muy diferente. Los usuarios de la prueba diagnóstica deben saber aplicar correctamente los datos locales para que la utilidad diagnóstica generada por la prueba sea adecuada al contexto clínico.

Palabras clave: Prueba diagnóstica exactitud diagnóstica sesgo sensibilidad especificidad razón de verosimilitud probabilidad preprueba y posprueba curva ROC.

2019-12-04   |   444 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 40 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2019 Pags. 342-57 Acta Pediatr Méx 2019; 40(6)