Autor: Serrano Sierra Alejandro
El tiempo transcurre vertiginosamente y llega el momento en que debemos hacer un alto para reflexionar en todos aquellos acontecimientos de fundamental importancia que ha vivido el Instituto Nacional de Pediatría, nuestra noble y gran institución de salud a lo largo de 45 años. Acontecimientos transformadores, de crecimiento y cambios sin precedente. Hoy veo una institución fuerte, vigorosa y caracterizada por el compromiso de sus trabajadores. Sin embargo, me pregunto: ¿hemos hecho todos nuestros máximos esfuerzos al servicio de la niñez mexicana y de sus familias sin seguridad social? y ¿por nuestros compañeros? Creo que no y que aún nos falta por hacer, la entrega y solidaridad hacia los demás se han quedado en muchas ocasiones en el camino, lo que nos obliga a esforzarnos más para lograr nuestra misión.
2016-06-01 | 219 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 36 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2015 Pags. 429-430 Acta Pediatr Méx 2015; 36(6)