Fragmento

La complejidad de la vida moderna y la globalización exige un trabajo profesional serio, basado en valores morales y principios éticos (hay que recordar que la ética general estudia el bien y el mal y sus relaciones el comportamiento humano). Estos valores han venido quedando en desuso y en este momento están afrontando una verdadera crisis. Avanzamos día a día en la perfección de conocimientos científicos y en logros académicos que nos hacen más competitivos en la vorágine del mundo laboral, pero los valores del ser humano, como delicadeza, gentileza, empatía y buena voluntad ya no se exteriorizan frecuentemente. Con la alta exigencia y presiones que tiene que afrontar el profesional en su actividad cotidiana, muchas veces quedan evidenciadas carencias en estos ámbitos.

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2017-08-14   |   121 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 40 Núm.1. Enero 2015 Pags. 5-8 Rev Fac Cien Med Quito 2015; 40(1)