Cirugía endovascular ¿Sí o no?

Autores: Gutiérrez Carreño Amado Rafael, Palma García Salvador

Fragmento

En la actividad cotidiana hay dos opciones: ver pasar el agua del río tranquilamente desde la orilla o bien subir a la canoa y disfrutar en todo su trayecto de todas las sorpresas que nos esperan. La Medicina no escapa a dicho concepto. La Angiología (considerando todos los vasos sanguíneos) no escapa a la revolución tecnológica que se ha sucedido en los últimos 15 años con los procedimientos de mínima invasión. Así, 42 años después de las primeras endarterectomías para aliviar el obstáculo al flujo sanguíneo se suman hace 32 años las aportaciones de Dotter en el concepto de terapéutica transluminal que culminan en su primera etapa hace 22 años con la angioplastia con balón diseñado por Gruentzig. La tendencia a la menor invasión corporal tanto en el diagnóstico (desde el Doppler dúplex, la resonancia magnética nuclear hasta la tomografía helicoidal 3D), así como en el manejo ha sido la pauta de finales del siglo y del milenio; la tecnología desarrollada no ha tenido más límite que la imaginación de los investigadores, se han desarrollado nuevos catéteres, guías, introductores y balones de alta resistencia. Así mismo se ha llevado al diseño de ultrasonido intravascular, angioscopios, aterotomos, taladros v.g. rotablator, ultrasonido y láser entre otros con el intento de repermeabilizar vasos ocluidos afectados por la ateroesclerosis a un "bajo costo" en términos de recuperación, dolor, molestias y con un buen grado de durabilidad.

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2004-04-22   |   912 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 24 Núm.3. Julio-Septiembre 1996 Pags. 48-49 Rev Mex Angiol 1996; 24(3)