Modelo de filtro metálico para medula ósea

Fragmento

En los últimos años se ha incrementado el empleo del trasplante de médula ósea (TMO) en sus distintas variantes y su indicación se ha extendido a diversas enfermedades hematológicas y no hematológicas. Durante el proceso de extracción de la médula ósea para el trasplante, ésta puede mezclarse con partículas de grasa, pequeñas espículas óseas y en ocasiones, pequeños coágulos de sangre. Para evitar la infusión de estos elementos al receptor y las posibles complicaciones, se han ideado diferentes procederes para la filtración de la médula extraída. La técnica utilizada por Thomas y Storb2 en sus primeros TMO es la que se considera el método convencional o "estándar", que aún se emplea en muchos centros de TMO. Como equipo de filtración se adaptó una jeringuilla de cristal de 20 mL cortada en su extremo distal, donde se ajusta una malla de acero inoxidable con orificios de 300 ó 200m, que se mantiene fijada a la jeringuilla mediante un aditamento metálico. Después de su extracción, la médula ósea se filtra en 2 tiempos: primero por la jeringuilla con la mall de 300m y después, por la que tiene la de 200m. Este proceso tiene el inconveniente de que es un sistema abierto de colección y filtración de la médula ósea, donde existe la posibilidad de rotura de la jeringuilla de filtración por la manipulación y además, de contaminación de la médula ósea en alguno de los diferentes pasos de su procesamiento. Con el empleo de esta técnica se apreciaron evidencias de contaminación bacteriana en el 17% de las médulas procesadas en un centro de TMO, aunque no se observaron manifestaciones clínicas secundarias a la contaminación. Con posterioridad, se han usado otros métodos alternativos con el fin de disminuir las posibilidades de complicaciones relacionadas con la manipulación de la médula ósea previa al TMO, y con algunos el porcentaje de contaminación ha sido mucho menor.

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2004-04-27   |   920 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 11 Núm.1. Enero-Junio 1995 Pags. . Rev Cubana Hematol Inmunol Hemoter 1995; 11(1)