Resumen

Objetivo: Describir una muestra preliminar de ecocardiogramas realizados en niños con dos tipos de patología: endocarditis infecciosa (El) y cardiopatías congénitas (CC), en quienes se comparan los informes obtenidos de dos métodos, ecocardiograma transtorácico (ETT) y ecocardiograma transesofágico (ETE) y se correlacionan con datos del diagnóstico de certeza obtenido por cateterismo cardiaco, por cirugía o por ambos. Material y métodos: Se estudiaron 42 niños, cuya edad varió de un día a cuatro años. Se dividieron en dos grupos: Grupo I, 15 pacientes con diagnóstico clínico presunto de El. Grupo II, 27 pacientes con diagnóstico de CC. El diagnóstico de certeza para el grupo I se apoyó en datos clínicos, ecocardiograma y hemocultivos. En el grupo II, en alguno o varios de los siguientes métodos: cateterismo cardiaco, angiografía o cirugía. Resultados: En el grupo I, fueron 15 pacientes cuyas edades fluctuaron entre 43 días y cuatro años (media de 17.8 meses). No predominó un sexo. El peso varió entre 2,215 gr y 14 kg. El diagnóstico de EI se apoyó en la presencia de fiebre en estudio y el antecedente de haber tenido instalado un catéter endovenoso para administración de líquidos, de medicamentos, o de ambos. El dato para sustentar el diagnóstico de EI con el ETE fue la presencia de masas intracardiacas en distintos sitios que se interpretaron como vegetaciones y que se vieron en 8/15 casos. En el grupo II, hubo 27 pacientes con diversas CC de las cuales se cateterizaron 24/27. En ambos grupos se realizaron los dos tipos de ecocardiograma: ETT y ETE. Conclusión: La facilidad de registrar imágenes en forma biplanar, permite al ETE visualizar áreas que no son accesibles con el ETT. Por esta razón entre otras, algunos investigadores insisten en que se recurra al ETE siempre que sea posible.

Palabras clave: Ecocardiografía transesofágica endocarditis infecciosa cardiopatías congénitas.

2004-09-20   |   2,240 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 17 Núm.6. Noviembre-Diciembre 1996 Pags. 339-345 Acta Pediatr Méx 1996; 17(6)