Infecciones en piel y tejidos blandos. Departamento de Pediatría.

Hospital Central de Maraca. Estudio prospectivo. Diciembre 1997-enero 1999 

Autores: Aouad Tórrez Roque Antonio, Paz Zaida M, Añez Kitty, González Carmen

Resumen

Se llevó a cabo un estudio prospectivo evaluando 97 pacientes con edades comprendidas entre 29 días y 12 años, ingresados con diagnósticos de infecciones de piel y tejidos blandos durante el período diciembre 1997-enero 1999.Los preescolares representaron 56,7% de la casuística. Predominó el sexo masculino (65%) y dos terceras partes vinieron del medio urbano (77,3%). Las celulitis y los abscesos (46,4% y 23,7% respectivamente), constituyeron las noxas más frecuentes. El segmento anatómico más afectado fueron las extremidades (51,6%) siendo el factor predisponente más importante la solución de continuidad cutánea (64,6%). La muestra para definir el agente etiológico fue a través de la técnica de punción por infiltración-aspiración lesional y punción dirigida por ecosonografía,ésta se realizó en un 10,3% del total de casos. Se evidenciaron 100% de cocos grampositivos con la técnica de Gram y en el cultivo creció Staphylococcus aureus en 97,5%. La velocidad de sedimentación globular al ingreso osciló entre 30-40 mm/H (72,8%). Se evidenciaron alteraciones radiológicas de tejidos óseos en 4,2% del total de los casos estudiados al momento del ingreso.El tratamiento fue médico, siendo los antibióticos ß-lactámicos (Oxacilina sódica) sólos o combinados con amikacina, los más usados (100%). El drenaje quirúrgico fue empleado en 27,8% del total de los casos estudiados. El promedio de hospitalización fue de 11,2 días, egresando 97,9% del total de los casos estudiados por mejoría. La mortalidad fue de 2,1%, representado por fasceitis necrotizante.

Palabras clave: Celulitis abscesos velocidad de sedimentación globular Staphylococcus aureus Oxacilina sódica.

2004-09-28   |   1,793 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 64 Núm.4. Octubre-Diciembre 2001 Pags. 170-176 Arch Venez Pueri Pediatr 2001; 64(4)