El Palacio de la Odontología.

(segunda parte) 

Autor: Díaz de Kuri Martha

Fragmento

El cambio de la vieja escuela de Brasil 35, al remozado edificio de Primo Verdad y Guatemala revitalizó el espíritu de alumnos y maestros. La generación que ingresó en 1935, sería la primera en cursar la carrera completa en el suntuoso edificio de vestíbulo de mármol y escalera con barandales de bellísima herrería. Era todo un lujo recorrer los pasillos llenos de luz, y entrar al Paraninfo de altísimos techos, sitio en donde años atrás se había firmado la autonomía universitaria. Entre los alumnos comenzaban a destacar los que serían figuras de la odontología en los próximos años: Guillermo Riquelme, Fermín Reygadas, Enrique C. Aguilar, Antonio Fragoso, Eugenio Vargas Tovar. El entusismo estudiantil era grande, pero la escuela distaba mucho de estar bien equipada, los sillones dentales eran los mismos que habían servido por lustros en Brasil 35, y se usaban todavía tornos de pedal. Entre los maestros, como ahora recuerda el doctor Fermín Reygadas, había algunos extraordinarios cuya actitud contrastaba con la de otros mediocres, como el que se expresaba ante sus alumnos diciendo: “todo lo que sé, me ha costado mucho tiempo y trabajo aprenderlo, y no se los voy a decir tan fácilmente”.

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2004-10-19   |   861 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 53 Núm.5. Septiembre-Octubre 1996 Pags. 230-232 Rev ADM 1996; LIII(5)