Fragmento

El impacto de la alergia en medicina se debe a que ha proporcionado bases científicas para explicar un importante número de patologías en el ser humano. La alergia y la inmunología nacen prácticamente en la misma época, ante la necesidad de prevenir, diagnosticar y tratar enfermedades infecciosas. Al intentar alcanzar tales objetivos surgen reacciones indeseables, como la enfermedad del suero y la anafilaxia. Desde que nace hasta que muere, el ser humano está expuesto a una serie de sustancias extrañas a su organismo –llámense bacterias, virus, hongos, parásitos o alergenos: polen, ácaros, insectos, sustancias químicas simples (haptenos), medicamentos, etcétera-. De su capacidad de respuesta ante esas sustancias depende precisamente su estado de salud y enfermedad. Si la respuesta es adecuada estaremos hablando de “inmunidad”; si es deficiente, de “inmunodeficiencia”; y si está alterada o exagerada, de hipersensibilidad o “alergia”. El asma, la dermatitis atópica y la rinitis son causadas por antígenos del ambiente llamados alergenos, los cuales son capaces de inducir un tipo especial de anticuerpos, llamados IgE, presentes en el suero, piel y mucosas respiratoria y digestiva.

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2004-10-19   |   3,690 visitas   |   Evalua este artículo 1 valoraciones

Vol. 4 Núm.5. Septiembre-Octubre 1995 Pags. 138-139 Alergia e Inmunol Pediatr 1995; 4(5)