La importancia de los antimicrobianos en odontología:

penicilinas naturales 

Autor: Viel Clément

Fragmento

La penicilina, el primer antimicrobiano betalactámico, fue descubierto en 1928 por sir Alexander Fleming en el Hospital St. Mary’s de Londres, quien publicó este hallazgo un año después en el British Journal of Experimental Pathology. Pero no fue sino hasta 1938 que el patólogo Howard Walter Florey y el bioquímico Ernst Boris Chain, en la Universidad de Oxford, rescataron la penicilina y entre ambos complementaron los estudios de Fleming. En 1945, los tres obtuvieron el Premio Nobel de Medicina. El hongo del que se obtuvo la sustancia natural fue el Penicillium notatum, aunque para su fabricación actualmente se obtiene del Penicillium chrysogenum, de la familia Aspergilaceas. La estructura básica de la penicilina natural es un núcleo de tres componentes; un anillo heterocíclico de tiazolidina, uno betalactámico y una cadena lateral, la cual, al ser modificada, da lugar a una serie importante de penicilinas semisintéticas. Al tener ácido 6-aminopenicilánico (6-APA), la penicilina es el antimicrobiano betalactámico base y un dipéptido ciclado por condensación de L-cys y D-val, que genera el anillo betalactámico y el anillo tiazolidínico.

Palabras clave: Penicilina antimicrobiano betalactámico.

2006-06-08   |   2,096 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 2 Núm.21. Abril 2006 Pags. 2 Odont Moder 2006; 2(21)