Educar es prevenir

Autor: Cordero Jaramillo Leoncio

Fragmento

Hasta mediados del siglo anterior, el cáncer era la enfermedad más temible, por incurable y dolorosa; ante la que el médico estaba derrotado, enfermedad rodeada de una tradición de sufrimientos, deformidades, amputaciones, y temor; para muchas personas una enfermedad vergonzante que había que ocultarla. Esto no sucedía solamente en nuestro medio, recordamos las palabras de Gregorio Marañón (1887-1960) ilustre médico, literato, investigador, ensayista e historiador español, al referirse a la preocupación del médico frente al cáncer: “El médico, nos dice, inclusive el muy dado a la lectura, incluso ese, hoy tan frecuente, que lee sin medida, que se interesa por las noticias de las últimas experiencias y sobre las últimas imaginaciones sobre cualquier capítulo de la patología, pasa de largo cuando el título de un artículo se refiere a los procesos cancerosos. Y a esto, a pesar de su frecuencia, real o aparente, de la terrible enfermedad aumenta de día en día y con ella la preocupación en ocasiones con visos de ansiedad de las gentes”. Este ambiente derrotista y de terror frente al cáncer, que dominaba en la población, como en el cuerpo medico, retardó en muchos años el progreso de la oncología en el país, hasta cuando el ilustre medico, patriota y maestro, doctor Juan Tanca Marengo (1895-1965) fundó SOLCA (1951) combatió estas ideas, destruyó estos conceptos y creó una nueva conciencia en el médico y la población, que permita el diagnostico temprano y la curación de la enfermedad.

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2006-12-19   |   954 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 16 Núm.1. Enero-Marzo 2006 Pags. 6 Oncología 2006; 16(1)