Resumen

Introducción: Durante la hospitalización puede verse favorecido el desarrollo de alteraciones en el estado nutricional, habiéndose informado frecuencias de aproximadamente 20% por diferentes autores. Se propuso como objetivos describir el estado nutricional de los pacientes al ingreso hospitalario, estimar su variación durante la internación e identificar los factores asociados. Población: Pacientes menores de 6 años, internados entre 1/11/95 y 31/7/96 en salas de Clínica Médica del Hospital P. de Elizalde, considerando una fracción muestral de 1:2. Material y métodos: Los pacientes fueron evaluados al momento de su hospitalización. Se obtuvo información relativa a nivel socioeconómico, antecedentes de enfermedad y motivo de internación. El estado nutricional se estimó a partir del peso y la talla, calculándose indicadores antropométricos (peso/edad [P/E], talla/edad [T/E] y peso/talla [P/T]) según estándares nacionales e internacionales. En aquéllos internados durante más de siete días se valoró el estado nutricional al alta. Resultados: Fueron evaluados 661 pacientes. La frecuencia observada de valores inferiores a 2 desvíos estándar (DE) al ingreso fue de 20.8% para P/E, 19.2% en el caso de T/E y 9% en P/T. El nivel socioeconómico, la instrucción materna, el peso al nacer y el número de internaciones se asociaron con el indicador P/T al ingreso (R= 0.29, R2 = 0.09, p < 0.001), mostrando diferencias al estratificar según edad. El 41% permaneció internado más de 7 días, presentando descenso en el indicador P/T el 33.3%. La variación en el indicador P/T se asoció con diagnóstico de bronquiolitis y P/T al ingreso. Conclusión: El presente estudio permite enfatizar la necesidad de valorar y considerar la situación nutricional en todo niño hospitalizado, independientemente de su estado al ingreso o el motivo de la internación.

Palabras clave: Estado nutricional valoración del estado nutricional internación apoyo nutricional.

2007-07-12   |   753 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 99 Núm.5. Septiembre-Octubre 2001 Pags. 405-413 Arch Argent Pediatr 2001; 99(5)