Tabaco y alcohol.

Las drogas bajo piel de cordero 

Autor: González Menéndez Ricardo

Fragmento

En una revista internacional que leí muchas décadas atrás encontré una caricatura —con cierto matiz de humor negro— en la que un médico de cara inexpresiva, le informaba al paciente que acababa de examinar: “mire, lo que usted tiene es una simple gripe y aunque yo sé que le produce muchos malestares, debo decirle que se trata de una enfermedad viral para la que no existe tratamiento, sin embargo, si se complica con una neumonía lo podemos curar con penicilina”. Después de un tercio de siglo de trabajo como especialista en adicciones y de haber desarrollado todas las gestiones preventivo-rehabilitatorias que dicha dedicación profesional implica, he llegado a pensar, que en el campo de los problemas asociados al uso inadecuado de drogas legales, y drogas de prescripción médica, así como al siempre totalmente inaceptable consumo de drogas ilegales, el uso generalizado del tabaco y las bebidas alcohólicas —el primero como paradigma de drogas legales que no afecta de manera relevante el comportamiento, y las segundas como prototipo de las drogas legales que sí lo hacen de manera catastrófica— representa en el plano social, lo que fue la grippe en el paciente de la caricatura, y que a partir de la sexta década del pasado siglo, el mundo se complicó con “neumonía”, a partir de la dolorosa generalización mundial del uso de la marihuana, la cocaína, las anfetaminas, el LSD, los hongos alucinógenos, el éxtasis, el ice, el love, y cuanta sustancia psicoactiva se les ocurra elaborar, traficar y vender a quienes se enriquecen con el sufrimiento ajeno.

Palabras clave:

2007-12-07   |   883 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 23 Núm.3. Julio-Septiembre 2007 Pags. Rev Cubana Med Gen Integr 2007; 23(3)