Esa cosa tan extraña y familiar que se llama la muerte

Autor: Wilson Osorio Jhon

Fragmento

Apertura Resulta al menos paradójico que hoy por hoy nos parezca anormal la fijación obsesiva de alguien por la muerte, pero nos resulta corriente la despreocupación completa por ella. O sea que nos parece patológico pensar su presencia inevitable y recurrente en nuestra vida, pero la indiferencia o el borramiento total no nos asombran. Cosa curiosa que habrá que tratar de explicar. Pues los humanos frente a la muerte, como frente a cualquier otra situación, nunca hemos reaccionado de manera igual. No existe la atemporalidad o ahistoricidad de las valoraciones humanas. Todas nuestras maneras de ver, sentir y comprender el mundo son permanentemente cambiantes. Este es el credo de los historiadores. Tomaremos y compararemos, a continuación, dos valoraciones contrarias, dos modos de relacionarse de manera distinta con la muerte: la visión medieval occidental y la versión occidental moderna.

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2007-12-19   |   1,136 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 21 Núm.2. Julio-Diciembre 2007 Pags. 95-100 CES Medicina 2007; 21(2)