Resumen

Desde su descubrimiento, el conducto torácico ha sido de poco interés para los anatomistas y los cirujanos. Se estudian porciones: abdominal, torácica y cervical. Cada una de ellas muestra variaciones que tienen importancia clínico-quirúrgica. El conocimiento de la morfología permite a los cirujanos evitar su lesión.

Palabras clave: Conducto torácico sistema linfático cisterna del quilo (de Pequet) ángulo venoso.

2008-05-06   |   3,920 visitas   |   4 valoraciones

Vol. 9 Núm.35. Abril-Junio 2007 Pags. 72-76 Med Univer 2007; 9(35)