Resumen

Los tratamientos farmacológicos para la hepatitis viral B crónica no han sido del todo exitosos, en general hay baja respuesta; los tratamientos son largos, producen resistencia a la droga y ocasionalmente efectos colaterales. Ante estas complicaciones, se ha puesto mucha atención al uso de plantas medicinales utilizando el extracto crudo, o compuestos aislados. Se requiere terapia intensiva, primero plantas con actividad hepatoprotectora, inmunoestimuladora y después el tratamiento con plantas antivirales que deberán ser mezclas cambiadas cada quince días para evitar la adaptación del virus a los principios activos. Varias plantas poseen efecto hepatoprotector el que es necesario para iniciar los tratamientos de la hepatitis viral B crónica; este efecto se debe a sus compuestos hidroxifenólicos al inhibir las peroxidaciones de los lípidos de la membrana celular protegiendo a los hepatocitos. El análisis químico mostró que estas plantas son cualitativamente iguales lo que coincide que sean efectivas en las enfermedades hepáticas y digestivas. El efecto antiviral se ha demostrado en diferentes plantas como las del género Agrimonia y Phyllantus de las que tres de los 25 compuestos (nirantina, hinkoina y brevifolina) obtenidos de cuatro especies del genero Phyllantus suprimieron 62.0 y 32.5% la producción de los antigenos HbsAg y HbeAg respectivamente. Estos resultados parecen indicar que las actividades se producen por diferentes mecanismos moleculares.

Palabras clave: Fitoterapia hepatitis b hidroxifenoles hepatoproteccion virus.

2008-05-28   |   1,625 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 9 Núm.3. Diciembre 2007 Pags. 190-197 Inv salud 2007; IX(3)