Mensaje para los nuevos académicos

Autor: García Procel Emilio

Fragmento

La Academia Nacional de Medicina recibe a 14 nuevos miembros numerarios, uno correspondiente y cuatro honorarios, al tiempo que otros 15 pasan a la categoría de titulares; todo esto sucede en una respetable ceremonia que se repite cada año desde hace más de 140. Los objetivos que se han perseguido invocan y refrendan las motivaciones que dieron origen a la propia institución en el siglo XIX. Los médicos de aquellos remotos tiempos vieron en Francia el modelo remozado de la enseñanza y la funcionalidad de las asociaciones médicas. El primer resultado de estas inquietudes se materializó con la fundación del Establecimiento de Ciencias Médicas en 1833. La trascendencia del decreto del doctor Valentín Gómez Farías nos deja la fecha del 23 de octubre para conmemorar a los médicos. El segundo impulso permitió instalar una corporación que uniese a médicos y cirujanos en un solo organismo, como acontecía en la Academia de Medicina de París en 1820. Nacieron de estos ímpetus varias academias o sociedades de corta vida que nos legaron sus intereses y preocupaciones con sus publicaciones regulares y periódicas. Una nueva persuasión vino a agregarse a los estímulos anteriores con la implantación de los conocimientos prácticos de la filosofía positivista. Recordemos que esta corriente surgió en Europa a mediados del siglo XIX y fue primordialmente promovida por Augusto Comte. Mediante su aplicación se reforzaba el análisis de los problemas teórico-prácticos, desde la perspectiva de la ciencia positiva; de allí su nombre. Pronto en nuestro país se buscó vincularla con los asuntos educativos superiores y la introducción novedosa de la biología, la química, así como con los conceptos de la física de su época.

Palabras clave:

2008-12-09   |   987 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 144 Núm.4. Julio-Agosto 2008 Pags. 363 Gac Méd Méx 2008; 144(4)