A trastornos complejos respuestas complejas

Autor: Vásquez Rojas Rafael Antonio

Fragmento

Los trastornos de la conducta alimentaria son enfermedades que se consideran mentales porque el escenario en el que se manifiestan es en el comportamiento de la persona. Su diagnóstico se hace sobre la base de que el paciente tenga síntomas por lo menos durante seis meses y que estos síntomas le causen molestias en su vida cotidiana. De hecho es el malestar cotidiano el que lleva a consultar al médico. La enfermedad se divide en tres grupos: anorexia nervosa, bulimia y trastornos no especificados. Este orden no es caprichoso. El mayor problema que enfrentamos los médicos son los pacientes anoréxicos, pues ésta es la única mortal de las tres entidades. En segundo lugar tenemos a los pacientes bulímicos y luego a los no especificados. Pero resulta por lo menos llamativo que la prevalencia del trastorno sea al revés. Los mayoritarios son los no especificados, luego los bulímicos y por últimos los anoréxicos. Sin duda esta distribución refleja el nivel de complicación que experimenta cada grupo. Estas complicaciones proceden de fuentes como el ciclo vital, la co-morbilidad con otras enfermedades emocionales, de la cultura y del sistema de atención en salud que deja un asunto vital en manos del mercado.

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2009-03-06   |   904 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 56 Núm.3. Julio-Septiembre 2008 Pags. 191-192 Rev Fac Med Univ Nac Colomb 2008; 56(3)