Fragmento

Introducción Entre las diversas técnicas operatorias empleadas en el tratamiento de la obesidad, el bypass gástrico en Y de Roux es el más realizado. Esta cirugía asocia principios de restricción en la ingesta de alimentos y de malabsorción, logrando adecuada pérdida de peso a largo plazo, con bajo índice de complicaciones y de efectos adversos tardíos. En 1966, Mason describió el bypass gástrico, el cual fue perfeccionado posteriormente por otros autores. Entre las décadas de 1980 y de 1990, Fobi y Capella publicaron series iniciales de pacientes sometidos al bypass gástrico en Y de Roux con una prótesis de contención, que funcionaba como un factor de restricción al vaciamiento de la bolsa gástrica. El anillo de contención comenzó a ser usado en el bypass gástrico en la década de 1980. Linner aplicaba un refuerzo en la anastomosis gastroyeyunal para prevenir su dilatación. Enseguida, otros autores fueron incorporando y perfeccionando este principio de contención hasta alcanzar el formato del procedimiento quirúrgico actual. No hay uniformidad en el tipo de material empleado y ni en el tamaño de la circunferencia de la prótesis, siendo descrito el uso de un anillo de silicona o de una cinta de Prolene® o de Goretex®, cuyo largo varía de 5.5 a 7 cm. Además, el uso de material protésico en la vía de salida de la bolsa gástrica permanece hasta hoy como un tema controvertido, considerando el real beneficio obtenido en la pérdida de peso y en su mantención a largo plazo, en detrimento del potencial riesgo de ocurrir intolerancia alimentaria, aparte del surgimiento de posibles complicaciones relacionadas al anillo, tales como: migración o erosión intragástrica, deslizamiento y estenosis de la vía de salida del pouch. Así, los autores objetivan describir las principales ventajas y desventajas del uso del anillo en el bypass gástrico en Y de Roux, a partir de la realización de una revisión de la literatura mundial.

Palabras clave:

2010-01-27   |   1,618 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 61 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2009 Pags. 571-577 Rev Chil Cir 2009; 61(6)