La safenectomía mayor con flebectomías produce cambios en el flujo de venas perforantes incompetentes

Autores: González Ruíz Miguel Ángel, Flores Escartín Martín, Serrano Lozano Julio Abel, Sánchez Nicolat Nora Elena, Fabián Mijangos Wenceslao, Carrasco González Hugo

Resumen

Objetivo: Demostrar que los pacientes con reflujo de venas perforantes requieren de cirugía de safena mayor para su corrección. Antecedentes: La enfermedad venosa crónica representa un problema de salud pública. Es una enfermedad de evolución crónica con gran prevalencia (35%) y con importantes implicaciones socioeconómicas. Método: Estudio longitudinal, prospectivo. Se incluyeron 65 pacientes de abril 2007 a febrero 2009. Se registraron variables demográficas y clínicas, edad, sexo, reflujo en sistema superficial, número, segmento y diámetro de venas perforantes. Se realizó Doppler dúplex venoso del miembro pélvico preoperatorio y postoperatorio. El sistema estadístico utilizado fue SPSS, la prueba estadística fue T pareada, se determinó riesgo relativo, así como la prueba exacta de Fisher. Resultados: Fueron evaluados 65 pacientes, con insuficiencia de venas perforantes asociada a reflujo de sistema venoso superficial, postoperados de safenectomia mayor con o sin flebectomias, 48 del sexo femenino (73.8%) 17 del sexo masculino (26.2%) media de edad de 42.2 años, se utilizó la clasificación CEAP. Se determinó el diámetro preoperatorio de las venas perforantes un rango mínimo de 2.60 y un máximo de 3.60 y en el postoperatorio un rango mínimo de 2.60 y un máximo de 3.30. Con la prueba estadística exacta de Fisher se obtiene un valor de 0.017 de significancia exacta. Conclusiones: Nuestros resultados son similares a los reportados en la literatura, en cuanto a que la insuficiencia de venas perforantes se asocia con mayor frecuencia a reflujo superficial que a alteraciones del sistema venoso profundo.

Palabras clave: Venas perforantes reflujo diámetro.

2010-07-30   |   2,031 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 38 Núm.3. Julio-Septiembre 2010 Pags. 96-101 Rev Mex Angiol 2010; 38(3)