Autores: Herrera Flores Israel, Cuevas Gómez Maricarmen, Flores Armas Eduardo Miguel, Dies Suárez Pilar, Valadez Reyes María Teresa, Romero Baizabal Bertha Lilia
Objetivo: Conocer la utilidad de la tomografía para detectar, en estadios iniciales, la invasión al nervio óptico en pacientes con retinoblastoma, con base en su grosor y la comparación con el grosor real obtenido en los estudios histopatológicos de los ojos enucleados, donde se comprobó la invasión. Material y métodos: Estudio retrospectivo y longitudinal que incluyó pacientes de ambos sexos con límites de edad de 3 meses y 11 años, con diagnóstico comprobado de retinoblastoma, en el Hospital Infantil de México Federico Gómez, en de enero de 2009 a enero de 2010. Se comparó el grosor del nervio óptico medido por tomografía con el grosor obtenido en la pieza patológica. Resultados: Se estudiaron 22 casos de los que en ocho pacientes se diagnosticó por tomografía; invasión del nervio óptico hubo una correcta correlación histopatológica en 4. En 13 pacientes se excluyó por tomografía la invasión al nervio óptico con una correlación histopatológica en 11 casos, y en dos casos el estudio histopatológico confirmó invasión al nervio óptico, sin que por estudio de imagen hubiera sospecha de ésta. Conclusión: La tomografía posee una alta especificidad para excluir la invasión al nervio óptico al valorar los cambios de intensidad y el grosor del nervio óptico; sin embargo, no es tan específica para diagnosticar la invasión al nervio óptico basándose únicamente en el grosor del mismo, para eso se aconseja no utilizar esto como base para su diagnóstico.
Palabras clave: Retinoblastoma nervio óptico invasión tomografía histopatológico.
2011-04-04 | 1,185 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 9 Núm.4. Octubre-Diciembre 2010 Pags. 168-173 An Radiol Mex 2010; 9(4)