Resumen

La opacidad de la cápsula posterior es actualmente el aspecto más importante en la cirugía de catarata de los tiempos modernos. Sigue siendo la complicación posoperatoria tardía más frecuente tras la cirugía de catarata asociada con disminución de la agudeza visual, deterioro de la sensibilidad al contraste y problemas de deslumbramiento que conllevan importantes repercusiones sociales, médicas y económicas. La capsulotomía láser aunque es un proceder efectivo para el tratamiento de esta complicación dista mucho de ser el método ideal puesto que se puede asociar a múltiples complicaciones. Debido a esto las investigaciones recientemente han dirigido su atención a estrategias de prevención de la opacidad de la cápsula posterior. Estas incluyen el diseño de los lentes intraoculares, técnicas quirúrgicas modificadas y/o mejoradas, implantes adicionales, empleo de fármacos y agentes citotóxicos así como el uso de nuevas tecnologías. La terapia génica, entre las novedosas intervenciones en estudio, parece ser una estrategia prometedora en este campo. No existe hasta ahora un método único que evite de modo definitivo la aparición de la opacidad capsular. El oftalmólogo debe usar la combinación de todos aquellos métodos que están a su alcance y han demostrada probada efectividad en la reducción de la opacidad de la cápsula posterior. Obtener excelentes resultados visuales a largo plazo es el objetivo de la cirugía moderna de la catarata así como abrir el camino a intervenciones quirúrgicas novedosas para el tratamiento de la presbicia en pacientes mayores de 40 años. Para lograrlo resulta fundamental impedir que la cápsula posterior se opacifique, aún más con el uso de lentes multifocales y acomodativos, que son más vulnerables a la opacidad que los lentes monofocales. Es por ello que nos atrevemos a decir que el mayor salto en la cirugía de la catarata moderna aún está por dar: la erradicación definitiva de la opacidad del saco capsular.

Palabras clave: Opacidad de cápsula posterior cirugía de catarata lentes intraoculares.

2011-07-12   |   970 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 23 Núm.1. Julio 2010 Pags. 608-623 Rev Cubana Oftalmol 2010; 23(Supl. 1)