Improvement of health gradient in workers who participated in a physical training program

Autores: García Rojas Isabel J., Ortega Álvarez Manuel Carlos, Robles Pérez Eduardo

Resumen

Mejoría del gradiente de salud en trabajadores sometidos a un programa de entrenamiento físico Introducción: La salud de los trabajadores es el acervo más valioso con el que cuenta un país; sin embargo, el compromiso de mantenerla y mejorarla en ocasiones se ve frenado tanto por factores económicos, como por la ausencia de profesionales capacitados. El concepto salud es muy complejo y se encuentra gran dificultad para caracterizarlo objetivamente pero a pesar de ello, sí se puede medir e incluso evaluar las consecuencias o el reflejo de estar sano. Tradicionalmente para medir la salud, se han utilizado medidas de resultado e índices indirectos o negativos, que miden las desviaciones al estado de salud y no la salud misma. Por otra parte, los indicadores positivos de salud son índices numéricos que detallan la situación funcional, física, mental y social actual, son cuantificables, objetivos, buscan signos de normalidad, por lo que se puede inferir el gradiente de salud de un individuo. Actualmente se cuenta con el Modelo XKE-1 que utiliza cuatro indicadores que son la fuerza muscular, la flexibilidad corporal, el consumo máximo de oxígeno y la composición corporal, y se han aplicado para determinar los requerimientos del puesto de trabajo y para la selección y determinación de la aptitud física para el puesto específico de trabajo. En el presente estudio, estos indicadores fueron valorados mediante un programa de entrenamiento físico. Material y métodos: En una empresa de autoservicios, se sometió a un programa de entrenamiento a 11 trabajadores asignados por el investigador durante un período de 10 semanas. Se trató de trabajadores de ambos sexos, 5 hombres y 6 mujeres, con un rango de edad entre 18 y 55 años, cuyo diagnóstico evaluado mediante historia clínica fue de “sanos”. Previo al programa de entrenamiento, se realizó historia clínica y laboral completa a cada trabajador, se tomaron sus signos vitales (frecuencia cardiaca en reposo, tensión arterial, frecuencia respiratoria), se calculó su frecuencia cardiaca de entrenamiento o submáxima, el consumo máximo de oxígeno ó VO2max y valores de glucosa, colesterol y triglicéridos en ayunas. La composición corporal de cada individuo fue determinada mediante plicometría. Una vez realizadas las mediciones, las cifras obtenidas se procesaron a través de fórmulas matemáticas, de las cuales se obtuvieron las distintas masas corporales (grasa, músculo, vísceras y hueso), en por ciento o en kilogramos. Todas las mediciones se realizaron en hemicuerpo derecho, con fines de estandarización. El programa de entrenamiento consistió en ejercicios de flexibilidad y fuerza combinados con ejercicio aeróbico. Este programa se llevó a cabo durante diez semanas y tuvo una duración promedio de 20 minutos al día. Al finalizar las 10 semanas se volvieron a realizar todas las mediciones antropométricas, las pruebas de fuerza, flexibilidad, determinación de VO2max, el perfil de lípidos y la glucosa de todos los sujetos de estudio. Debido a que los resultados no mostraron una distribución normal, éstos fueron analizados con una prueba no paramétrica, la prueba de rangos con signo de Wilcoxon y utilizando el paquete estadístico STATA 10.0 para evaluar si existía o no un aumento significativo en cuanto a la mejora de las variables. Resultados: Posterior a las 10 semanas de entrenamiento se observó un incremento de la capacidad aeróbica de un 8% en los hombres y 23% en las mujeres, la masa muscular aumentó 1.5% en los hombres y 10% en las mujeres, la flexibilidad corporal mejoró en un 30% en los hombres y 62% en las mujeres y la fuerza muscular se incrementó un 38% en los hombres y un 68% en las mujeres. En cuanto a los exámenes de laboratorio valorados en este estudio, la glucosa no tuvo cambios importantes, el colesterol disminuyó en un 7% en los hombres y en un 15% en las mujeres y los triglicéridos mostraron una baja de 16% en los hombres y de 30% en las mujeres. El gradiente de salud también se modificó de manera positiva, de un promedio general de 94.4 antes del entrenamiento a 107.6 posterior al mismo. Los resultados obtenidos fueron estadísticamente significativos para cada uno de los parámetros medidos, excepto para la glucosa. Discusión y conclusiones: Los resultados mostraron concordancia con el objetivo planteado, pues los 4 indicadores positivos de salud obtuvieron una diferencia significativa en su mejora al término de las 10 semanas de entrenamiento. En general, los programas de entrenamiento físico individualizados en los países desarrollados son bastante costosos, ya que requieren una gran cantidad de personal e instalaciones deportivas específicas en el lugar de trabajo, situación que las empresas están dispuestas a pagar en algunas ocasiones solo para directivos o para trabajadores con mayor antigüedad dentro de la empresa. La sencillez y bajo costo de nuestro protocolo fueron ventajosos para poder aplicarlo dentro de la jornada laboral y ponerlo a disposición de todos los trabajadores en la empresa sin distinción de rangos. Una ventaja adicional es que el programa de entrenamiento presentado en este estudio podría extrapolarse al domicilio de cualquier trabajador si se le instruye para medir su propia frecuencia cardiaca, quitando así las excusas más frecuentemente encontradas para no realizar actividad física las cuales son la falta de tiempo, falta de equipo o facilidades para el ejercicio, condiciones climáticas adversas y, en nuestro medio, los asaltos en lugares públicos. Por otra parte, con este programa de entrenamiento se contestan varias preguntas en cuanto al tipo, cantidad e intensidad del ejercicio que cada individuo debe realizar, debido a que el programa es personalizado y se toman en cuenta las variables fisiológicas y antropométricas de cada trabajador. En conclusión, los hallazgos de este estudio comprueban la utilidad del entrenamiento para incrementar el gradiente de salud al aplicar los criterios del modelo XKE-1 y permiten afirmar que se puede contar ahora con una herramienta útil para llevar a cabo realmente medidas de promoción a la salud y para la vigilancia de la salud de los trabajadores.

Palabras clave: Gradiente de salud programa de intervención actividad física indicadores antropométricos fisiología del trabajo.

2012-05-14   |   1,055 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 1 Núm.9. Junio-Septiembre 2011 Pags. 4-10 REMESAT 2011; 1(9)