Fragmento

La enfermedad «mental» del médico constituye un serio problema, no sólo en lo que concierne a él individualmente, como a cualquier otro sujeto, sino por la naturaleza de sus responsabilidades y las posibles consecuencias para la sociedad. Últimamente son abundantes los trabajos en los que se muestran diversos disturbios emocionales en el personal de salud, sobre todo de los médicos que presentaban estos problemas de significación y que «pudieron haber sido identificados y tratados durante la época estudiantil». Surge la pregunta inevitable: ¿es posible entonces la prevención? Los estudiantes de Medicina, más que los estudiantes de otras profesiones, pueden beneficiarse de la posibilidad de ser sometidos a estudios exhaustivos destinados a investigar la existencia de desajustes, de disturbios emocionales, de inmadurez. La educación médica exige ajustes psicológicos, y dependiendo de su capacidad para sortear estas dificultades podrán eludir la futura aparición de reacciones adversas.

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2012-07-26   |   440 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 18 Núm.116. Noviembre-Diciembre 2011 Pags. 3-4 GINECO 2011; 18(116)